Barcelona
Distrito de Sants-Montjuïch de Barcelona
El distrito de Sants-Montjuïch es el tercero de los 10 distritos en que se divide administrativamente Barcelona. Tiene más de 180 mil habitantes y es limítrofe con l’Hospitalet de Llobregat, el Prat de Llobregat, Ciutat Vella, les Corts y l’Eixample.
El distrito de Sants-Montjuïch se divide en diferentes barrios: el Poble-sec, Santa Maria de Sants, la Zona Franca, Bordeta-Hostafrancs, Font de la Guatlla-Magòria y Montjuïch.
El carrer Gran de Sants, la calle mayor, en proporción a su longitud, es la calle con más comercios del mundo abiertos por metro cuadrado. Este distrito de Barcelona cuenta también con la Estació de Sants, una de las arterias logísticas de Barcelona con conexiones ferroviarias de cercanías, regionales y larga distancia. En la Estació de Sants es donde tiene parada el AVE.
El mercado de Sants también es famoso por su variedad y su larga historia. Cerca de éste se establece una colonia de “gitanos catalanes”. Este colectivo de calés lleva instalado en Cataluña desde hace siglos y se les conoce como “els gitanos catalans” porque es el catalán su lengua materna. Es precisamente gracias a los gitanos que en Perpiñán, históricamente territorio catalán, aún se usa esta lengua con normalidad por las zonas por donde residen.
A Sants-Montjuïch también pertenece la Montaña de Montjuïch, el pulmón de Barcelona, donde se encuentran la Font Màgica, el Pabellón Mies van der Rhoe, el MNAC, el CaixaFòrum, el estadio olímpico, el Palau Sant Jordi, el Poble Espanyol, el cementerio modernista de Montjuïch, la Fira de Barcelona…
La Zona Franca, también perteneciente a este distrito, es una zona básicamente industrial y es donde se ubica el puerto de Barcelona. En un sector de este barrio, el Ajuntament de Barcelona ha decidido potenciar la implantación de las TIC, igual que en la zona Fòrum, para dinamizar la economía de la ciudad. Se están llevando a cabo obras para adaptar la zona y ya son visibles preciosos rascacielos de diseño. La Fira de Barcelona ha llevado a cabo su ampliación en la Zona Franca.
El Poble-sec
El Poble-sec está situado entre la falda de la montaña de Montjuïch i l’Avinguda Paral·lel.
Este barrio fue el primer ensanche de Barcelona. Después de tirar las murallas medievales, la oposición al Plà Cerdà hizo que se retrasaran varios años la construcción de edificios en l’Eixample. Como la zona del Poble-sec quedaba fuera del proyecto urbanístico, los propietarios de las tierras decidieron construir en sus parcelas siguiendo la estructura que ellos creyeron más oportuna. Se edificaron casas para obreros y la zona se dividió entre los barrios de La França Xica, Santa Madrona y las Hortes de Sant Bertran, que más tarde serán el Poble-sec.
El Poble-sec es un barrio humilde, pero en realidad goza de una situación privilegiada. Está cerca del puerto, del casco histórico de Barcelona, de Montjuïch y de l’Eixample.
El Poble-sec cuenta con una de las calles más famosas de Barcelona: l’Avinguda Paral·lel. El Paral·lel es lo que se llamó el Broadway barcelonés. Durante principio de siglo XX los jóvenes burgueses bajaban a esta zona de la ciudad llena de cafés y teatros y, además, cerca del actual Raval, antes llamado el barrio Chino, repleto de prostíbulos, cabarets y vicio. El auge de el Paral·lel duró años, pero en los años 90 cae “El Molino”, el icono de esta calle. A iniciativa del Ajuntament de Barcelona, se quiere recuperar esta zona en decadencia y en parte ya se ha conseguido. El Teatre Apolo, por ejemplo, hace años que funciona y bien. Reciclado en teatro, discoteca y hotel, el Apolo es uno de los puntos de ocio más concurridos de Barcelona.
De entre los teatros más famosos que tuvo o aun tiene el Paral·lel, cabe destacar “El Molino”, inspirado en el Moulin Rouge de París y reabierto recientemente como sala de espectáculos de calidad, restaurante y shows variados. El Teatre Apolo, el Teatre Victoria, el Teatre Condal, el Teatre Paco Martínez Soria, cerrado y derruido hace años, el Arnau, que fue una de las salas de fiestas más famosas con espectáculos de vedettes y en donde la musa era “La Maña”, quien sigue reivindicando la reapertura del Teatre Arnau. De la época de la transición encontramos el quizá más famoso de todos ellos hoy en día, la Sala Bagdad, donde se realizan espectáculos eróticos y porno en directo.